¿SUSTITUCIÓN DE IMPORTACIONES?

PESOS Y CONTRAPESOS

El gobierno mexicano reprueba, ¡con razón!, los aranceles con los que el gobierno estadounidense grava las importaciones de acero y aluminio mexicano, y responde, ¡contradictoriamente!, con la misma medida: imposición de aranceles a productos importados hacia México desde los Estados Unidos, aranceles que, al traducirse en un mayor precio de esos productos, atentan contra el bienestar de los consumidores mexicanos, aranceles que estarán vigentes hasta que el gobierno estadounidense elimine los aranceles al acero y al aluminio.
Hay quienes consideran que la afirmación de que los aranceles impuestos por el gobierno mexicano a importaciones estadunidenses se traducirán en mayores precios para el consumidor mexicano no necesariamente es cierta, ya que muchos de esos productos tienen sustitutos producidos en México, tal y como es el caso de las manzanas, que se producen en Chihuahua, Durango y Puebla. La pregunta es, ¿tiene la producción nacional la capacidad para sustituir, al mismo precio (aquí está el detalle: ¡al mismo precio!), la oferta de manzana importada, cuyo precio, consecuencia del arancel del 20 por ciento con el que el gobierno mexicano grava su importación, necesariamente aumentará?
Según datos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), en este 2018 se producirán en el país 758.3 miles de toneladas de manzana, al tiempo que la demanda nacional será de 950.3 miles de toneladas, por lo que la producción nacional satisfacerá el 79.8 por ciento de la demanda y la importación, que se ofrecerá a un precio mayor (a menos que el importador mexicano esté dispuesto a absorber el arancel sin intentar traspasarlo al consumidor mexicano vía un mayor precio), el restante 20.2 por ciento.




Supongamos que el consumidor mexicano no está dispuesto a pagar un mayor precio por la manzana importada, deja de comprarla, deja de importarse, por lo que, de manera inmediata, se reduce la oferta. Si la caída en la demanda por la manzana importada se traduce en un aumento en la demanda por la manzana nacional, y si la producción y oferta de ésta no puede aumentar, ¿qué pasará con su precio? Aumentará.
Más o menos el 97.8 por ciento de la importación de manzana viene de los Estados Unidos, 1.9 de Chile, 0.3 de Canadá y 0.02 de Nueva Zelanda. ¿Se podrá sustituir la importación desde Estados Unidos con importaciones desde Chile, Canadá o Nueva Zelanda? Y si sí, ¿a qué precio? Esta es, insisto, la pregunta.
Ante el encarecimiento que ocasionarán los aranceles impuestos arbitrariamente por el gobierno mexicano a la importación de productos estadounidenses, puede darse la sustitución de importaciones, ya sea con producción nacional, ya sea con importaciones de otros países. La pregunta es ¿a qué precio se ofrecerán esos productos sustitutos?
E-mail: arturodamm@prodigy.net.mx
Twitter: @ArturoDammArnal