¿ABOLICIÓN DEL NEOLIBERALISMO?

PESOS Y CONTRAPESOS

En el mensaje que dio en la clausura del foro nacional “Planeando juntos la transformación de México”, AMLO dijo: “Quedan abolidas dos cosas: el modelo neoliberal y su política económica…”, momento de preguntarnos qué es lo que se abole con la abolición del neoliberalismo.
La respuesta depende de qué entendamos por neoliberalismo. Si entendemos el Consenso de Washington, el decálogo que en 1989 propuso John Williamson, indispensable para lograr un mayor progreso económico, entonces abolir el neoliberalismo implica hacer lo contrario de lo que propone el decálogo. Sería un grave error.
Sintetizando el Consenso de Washington propone: disciplina fiscal, tanto por el lado de los ingresos como de los gastos; reforma fiscal, con reducción de impuestos y ampliación de la base de contribuyentes; precios determinados en el mercado, sobre todo tasas de interés y tipos de cambio, sin manipulaciones del gobierno; apertura comercial; promoción de la inversión extranjera directa; privatización de empresas gubernamentales; desregulación de las actividades económicas de los particulares; seguridad jurídica para los derechos de propiedad, comenzando por los medios de producción.




Si la política posneoliberal que anunció AMLO supone medidas antineoliberales entonces el resultado será lo contrario al Consenso de Washington: indisciplina fiscal (más déficit y más deuda); contrarreforma fiscal (más impuestos y menos contribuyentes); manipulación de precios (comenzando por tipos de cambio y tasas de interés); proteccionismo comercial (no más importaciones); prohibición de la inversión extranjera directa; expropiación de empresas privadas; más regulación de las actividades económicas de los particulares; inseguridad jurídica para los derechos de propiedad, todo lo cual sería un grave error. El camino hacia el progreso económico, definido como la capacidad para producir más y mejores bienes y servicios, para un mayor número de gente, pasa por el decálogo del Consenso de Washington.
Al margen de las consideraciones anteriores, la primera pregunta que debemos responder es ¿qué tanto neoliberalismo tenemos en México? De las diez medidas del decálogo del Consenso de Washington, ¿cuántas se aplicaron? Y las que se aplicaron, ¿con qué amplitud y profundidad se aplicaron?




En México la aplicación del neoliberalismo ha sido resultado, más del pragmatismo liberalizante, sobre todo a partir del sexenio de Salinas de Gortari, que de una convicción verdadera y genuinamente liberal, a favor del laissez – faire (dejar hacer) y del laissez – avoir (dejar poseer); de la libertad individual, la propiedad privada y la responsabilidad personal.
La segunda pregunta que debemos hacer es ¿qué tan abolido quedará en la práctica el neoliberalismo, si el mismo AMLO se ha comprometido, para empezar, con la disciplina fiscal, primer mandamiento del decálogo del Consenso de Washington?
E-mail: arturodamm@prodigy.net.mx
Twitter: @ArturoDammArnal
18 de marzo de 2019
E-mail: arturodamm@prodigy.net.mx
Twitter: @AretruroDammArnal