AFORES, ¡CUIDADO!

PESOS Y CONTRAPESOS

En un artículo publicado en Reforma, Carmen Aristegui afirma que “el más reciente informe de la Organización Internacional del Trabajo sobre la privatización de las pensiones en América Latina y algunos países de Europa del Este es, francamente, estremecedor. Es el vivo retrato de un error de grandes dimensiones, cuyos impactos se expanden tanto a las economías de los países como a franjas enteras de la población (…) Lo que ha prevalecido en estos últimos 30 años son los bajos rendimientos y cobertura y prestaciones insuficientes (…) Las promesas de mejores rendimientos y seguridad simple y sencillamente no se cumplieron”.
Dados los malos resultados, continúa Aristegui, “el 60% de los países que privatizaron han revertido el modelo”, y remata señalando que “a diferencia de las demás naciones México no ha entrado en el obligado proceso de revisión, y en su caso de reversión, del modelo de privatización de las pensiones, (estando) obligado a abrir un amplio debate sobre este tema y revisar (…) las experiencias de los países que se han adelantado en el proceso de reversión…”.




Las reacciones en redes sociales no se hicieron esperar. Cito tres, la última mía.
@ZenTraderMx apuntó: “Aristegui, hoy “experta” en sistemas de pensiones, sale a abogar por la abrogación de las AFORES y por transferir y asignar el manejo de esos recursos al Gobierno citando un “estudio” hecho por burócratas de la OIT que no aguanta el mínimo escrutinio”.




@frubli, por su parte, dijo: “Tendría muchos comentarios, pero va solo uno: ya que doña Carmen se inclina por revertir el actual sistema, ¿ha calculado el costo fiscal de lo que costaría la reversión? ¿Aguantarían las finanzas públicas este costo a lo largo de las décadas por venir?
@ArturoDammArnal: “Además, más allá del aspecto técnico, está el ético: los recursos depositados en las Afores son de los cuentahabientes. Si el gobierno SE transfiere esos recursos violaría el derecho de propiedad, lo cual no creo que le quite el sueño. Allí está el peligro”.
Si el actual sistema de pensiones tiene excesos (costos excesivos) y defectos (bajos rendimientos) lo que debe hacerse es corregirlo, no revertirlo, de entrada porque la reversión supondría regresar al sistema de reparto, en el cual los trabajadores en activo aportan obligatoriamente recursos para las pensiones de los jubilados, por lo cual, de entrada, el gobierno fuerza a unos (los trabajadores en activo) a ayudar a otros (los jubilados), lo cual, por más que se le califique de solidario, es un abuso. En el régimen de capitalización individual cada quien aporta obligatoriamente para su jubilación. En ambos sistemas existe la obligatoriedad de aportar, pero de que me obliguen a ayudar a los demás, a que me obliguen a ayudarme a mí mismo, prefiero lo segundo, con la libertad para escoger Afore, libertad que se debe preservar, libertad que se perdería si se lleva a cabo la reversión.
E-mail: arturodamm@prodigy.net.mx
Twitter: @ArturoDammArnal