CONADE Y EL SOBREPESO INFANTIL

En entrevista reciente la titular de la CONADE, La Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, que entrará en funciones en el próximo gobierno, Ana Gabriela Guevara, explicaba a Carlos Loret de Mola su visión de los retos que tiene esa institución de cara al futuro.
Evidentemente el tema de la corrupción en los organismos que deben promover el deporte es de alto impacto y ella lo mencionaba como un tema importante que tendrá que atender en la CONADE apenas tome el cargo.
Desde que el deporte profesional se convirtió en una de las modalidades de la industria del entretenimiento, perdió los valores que tradicionalmente le daban significado e identidad y ahora le dio objetivos comerciales y económicos. Hasta la FIFA se ha visto lastimada por escándalos de corrupción. Erradicar la corrupción en el ámbito del deporte es un tema jurídico que con la ayuda de profesionales tendrá que resolver.
Sin embargo, llama la atención que una medallista olímpica como ella, en lugar de orientarse como prioridad hacia la preparación de los atletas que representarán a México en los próximos Juegos Olímpicos de Tokio en el 2020, lo cual con toda seguridad es un mecanismo que camina solo, sin necesidad del involucramiento personal del titular del CONADE, pues está en manos de profesionales, como lo ha estado siempre, ella considere un reto prioritario lograr un objetivo que poca atención ha tenido: la vinculación del deporte con la vida escolar de millones de niños mexicanos.




No debemos olvidar que aunque la CONADE es un organismo público descentralizado, está adscrito a la Secretaría de Educación Pública.
Ana Gabriela explicaba la cercanía que ha tenido recientemente con Esteban Moctezuma, titular de la SEP en la nueva administración, en busca de incluir la cultura del deporte en el ámbito escolar, con una visión de fomentar una vida sana durante los primeros años, para impactar la solución de grandes problemas de salud que hoy aquejan a los mexicanos.
Ella vinculaba la necesidad de incluir el deporte en la currícula escolar para combatir la obesidad infantil, que podría ser el origen en gran medida de problemas de salud pública, como son los cardiovasculares y la diabetes.
Para nadie es desconocido que los antecedentes genéticos de la persona son determinantes para muchas enfermedades, pero las manifestaciones se agravan por falta de disciplina alimentaria y ausencia de actividad física. Los alimentos chatarra han deteriorado el equilibrio alimentario del mexicano, pero el impacto de la vida sedentaria generada por las nuevas tecnologías, que impulsan a niños y jóvenes a focalizar su diversión a través de un dispositivo electrónico como una tablet, una laptop o un celular, ha sido determinante.




Las generaciones anteriores a la de los nativos digitales, encontraban diversión en la bicicleta y las competencias físicas en forma de juego cotidiano, que fomentaban también la convivencia con compañeros de escuela y vecinos, que es otro aspecto que hoy se ha minimizado.
El tiempo de ocio de la niñez y juventud hoy se canaliza más al ámbito virtual, que a la relación interpersonal y colectiva, como la que fomenta el deporte.
Los nativos digitales hoy son más proclives a vincularse a través de la red en relaciones superficiales que a la vinculación afectiva con quienes les rodean, lo cual será determinante en la vida adulta para el manejo social y familiar.
Que desde la escuela se fomente el deporte y la actividad física de los alumnos seguramente traerá aparejados beneficios adicionales como lo es la disciplina personal, convivencia interpersonal, generación de significados de lo que es la competencia constructiva, donde se gana o se pierde y la necesidad de hacer de la derrota un estímulo para la superación.
El deporte nos enseña a asimilar y superar derrotas y fracasos, lo cual impacta la vida emocional.
Es una acertada y muy oportuna visión del deporte la que hoy trae Ana Gabriela Guevara. Su positiva incidencia en la salud pública y en la formación de valores derivados del deporte, serán un valor agregado de alto impacto, para compensar en niños y jóvenes la vida sedentaria de hoy.
Los resultados se verán a mediano plazo.
¿Usted cómo lo ve?
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