EDUCANDO MACHOS

El problema de la violencia sobre la mujer nace en el seno de la familia. Siempre los valores, del tipo que fueren, se forjan en el ámbito familiar desde la más temprana edad, cuando el bebé observa la conducta de los padres y toma esa referencia como el modelo a seguir.
Por una parte, la violencia intrafamiliar, cuando existe, deja huella en el consciente del niño o niña
Sin embargo, cuando el niño crece y la relación del adolescente con el género opuesto ya tiene un nuevo componente, que es el sexual, la actitud de la madre consolida lo que será la conducta de los hijos varones, por un lado y las hijas por otra.
Hay una tendencia en la madre mexicana a sobreproteger al hijo y justificar su conducta incluso cuando se convierte en agresor de una mujer. El machismo se aprende en la familia.
A su vez, a la mujer se le educa con el complejo de la provocación. Generalmente serán declaradas culpables de haber provocado a su agresor, aunque no haya sido así. El argumento podrá ser la ropa, las actitudes y hasta el hecho de haber estado en el lugar equivocado.
Cuando la violencia tiene un desenlace fatal, es cuando vienen las sorpresas.
Evidentemente no en todas las familias se practican estas costumbres, pero sí podemos observar esta tendencia social.
La mujer al proteger de modo instintivo al hijo le justifica la violencia contra las mujeres y traslada la responsabilidad de la agresión a la víctima.
Si esto nace en la familia, es reconocible el Impacto,
No se podrá combatir la violencia femenina si no se ataca desde sus orígenes, la familia.
Usted, cómo lo ve:
Facebook: @Ricardo.homs
Twitter: @homsricardo
Linkedin:
Ricardo Homs
www.ricardohoms.com