LA VOZ MÉXICO… ¿EN INGLÉS?

margarito
 Ricardo Homs

Parece que este tema debiese ser exclusivo de la sección de espectáculos. Sin embargo, estos temas pueden tener otras implicaciones y por ello se incluye en este espacio dedicado a temas sociales y políticos.
La industria del espectáculo es reflejo de las inquietudes, deseos e ilusiones de la sociedad y por ello impacta en el ánimo colectivo.
El cine, la TV y la industria fonográfica definitivamente impactan en el estilo de vida cotidiano de la sociedad y además generan valores culturales colectivos, pues imponen modas. Por ello no creo fuera de lugar hablar de este tema en este espacio.
En este programa, “La voz México”, que busca descubrir nuevos talentos, aparecen con frecuencia concursantes que se presentan cantando en inglés y ese es el tema que se propone para el análisis.
Por supuesto que los participantes tienen todo el derecho de cantar en el idioma que les plazca. De hecho los cantantes y grupos extranjeros que se presentan en México, utilizan ese idioma. Muchas estaciones de radio tienen toda su programación dedicada al género de canciones en inglés, lo  cual en lo personal me gusta.
Sin embargo, cuando se trata de un programa de TV dedicado al descubrimiento de nuevos talentos que deben enriquecer a la industria nacional del espectáculo, el tema del idioma, estilos de interpretación y géneros musicales, se vuelve importante. Si no responden a las necesidades del mercado local, no están logrando su objetivo.
Muchachos desconocidos que buscan su primera oportunidad en el ámbito profesional deben tener muy claro que su primer objetivo debe ser lograr éxito en el mercado  nacional. Cuando lo logren podrán pensar en la internacionalización grabando en otros idiomas.
Es muy difícil generar un éxito global sin haber logrado antes el éxito absoluto en el propio país.
No ha surgido en México ninguna nueva estrella musical proveniente de este tipo de programas de concurso, que se haya consolidado ya en el ámbito profesional como un gran éxito masivo, como sí ha sucedido en otros países, con intérpretes como Susan Boyle en Inglaterra.
Lo anterior quiere decir que estos nuevos talentos no están conectando con el público. Que muchos de ellos tienen grandes voces, sin duda que la poseen. Sin embargo, las grandes estrellas del espectáculo hoy no se consolidan sólo por poseer  grandes voces. Se necesita formarles una identidad integral, carismática,
Hoy vemos que las grandes estrellas del deporte no sólo deben tener alta eficiencia en el desempeño, sino también carisma. Las grandes figuras del deporte profesional traen un carisma de tal magnitud, que terminan logrando grandes contratos para campañas publicitarias.
Si eso sucede en el futbol donde meter goles o saber pararlos es fundamental pero no suficiente, en la industria del espectáculo donde todo es relativo, objetivo y de percepción, desarrollar el carisma y tratar de encontrar a la gente que conecte emocionalmente con el público, es fundamental.
Cantar en inglés o presentar a los nuevos talentos interpretando géneros que no conectan con el público, explica por qué no se han encontrado en los programas de concurso cantantes que, habiendo tenido el respaldo de la TV, se conviertan en fenómenos de mercado.
Hoy las ventas de canciones en CD´s o descargas digitales son la referencia del impacto de un intérprete en el mercado.
Desde hace muchos años hemos visto que las grandes estrellas de la música, muchas de las cuales hoy siguen vigentes, no forzosamente poseían una gran voz, aunque algunas sí la tuvieran y no sobra esta capacidad.
Desde un Roberto Carlos, Julio Iglesias, Emmanuel o Enrique Guzmán por citar algunos, que tienen más de cuarenta años en el espectáculo y siguen vigentes hoy, hasta muchas figuras surgidas en los últimos años en todo el mundo, podemos decir que no han sustentado su éxito en su voz, sino en su capacidad de transmitir emociones a partir de una interpretación que conecta con el gran público, poseer una propia identidad en su interpretación, altamente diferenciada, que no se parece a ningún otro, una imagen carismática, la selección de canciones. En resumen, su éxito es la suma de atributos de personalidad.
Más que buscar voces, debemos pensar que estos programas de TV deben buscar talentos que vengan a renovar la industria del espectáculo nacional y que después podamos exportar a otros países.
Seguramente la falta de impacto descubriendo nuevas figuras musicales a través de programas de concurso como La Voz México, no está en la ausencia de gente talentosa de nuestro país, sino en los criterios equivocados de quienes producen estos programas. Falta estrategia para identificar a quienes tienen potencial y también una falta de seguimiento estratégico de sus productores para formar integralmente a quienes han seleccionado.
Que estos programas entretienen y por ello tienen alto rating, o alto número de audiencia y televidentes, no cabe duda. Por ello tienen horario estelar.
Debemos reconocer que el formato del programa de concurso, donde interviene la competencia, estimula la curiosidad del público. Sin embargo, su aportación al descubrimiento de nuevos talentos es muy pobre.
Por ello debiesen ser replanteados sus objetivos, bases, criterios de selección y sistemas de coaching, para que cumplan su objetivo de ser semillero de grandes figuras del espectáculo.
El ideal de que tengamos una generación de nuevos intérpretes musicales, deportistas, científicos, cineastas, escritores y en general gente talentosa que llegue a ser reconocida internacionalmente, en mucho ayudará a hablar bien de México y cambiará la percepción de nuestro país en el exterior. Por tanto, necesitamos ser más efectivos en este ámbito.
E-mail: ricardo.homs@usa.net