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| Josué Segura |
Desde hace 20 años que los niveles de pobreza en México no sufren ningún cambio y de acuerdo con la OCDE, México es el único país latinoamericano que registra una tendencia regresiva en materia de reducción de pobreza ¡Cada vez más alarmante!
Los datos, comparados entre INEGI, CONEVAL y la OCDE:
- En el 2012, 53.3 millones de mexicanos vivían en pobreza, es decir 45.5%.
- Pobreza según las entidades: Baja California 28.6%, SLP 52.6%, 74.7% en Chiapas; 69.7% en Guerrero, 61.9% Oaxaca, 54.4% en Michoacán, 58% en Veracruz, Edo. De México 49.6% y en la Ciudad de México un 28.9%.
- Más de la mitad de la población vive en pobreza
- En 11 estados mexicanos, niños, mujeres y personas mayores corren un alto riesgo de caer en pobreza extrema, es decir, aquellas personas con ingresos inferiores al nivel mínimo de bienestar y que sufren al menos tres de las seis debilidades sociales en materia de alimentación, educación, vivienda y acceso a la seguridad social.
- 5 millones de personas vivían en extrema pobreza en México, es decir, 9.8% de la población total.
- En Oaxaca 1.6 millones de personas viven en pobreza extrema, que junto con el Estado de México y Puebla, estas entidades representan el 60% del total nacional.
- Las personas en extrema pobreza representan el 32% de la población en Chiapas y 2.2% en el Distrito Federal.
¿Quiénes puedes ayudar en esta labor?
Muchos aún piensan que de esta problemática se necesita encargar el Estado, alegando se requiere invertir más recursos para la reducción de pobreza y el crecimiento de la productividad, así como en políticas urbanas y territoriales. Pero díganme ¿A servido de algo dejarle tal labor al Estado? ¡No! Estamos perdiendo tiempo, hagámoslo nosotros, individual y voluntariamente o bien aportemos económicamente a algunas de las ONG altruistas, entre ellas World Vision (actualmente soy voluntario), Hábitat para la Humanidad, Aldeas Infantiles SOS, Oxfam, UNICEF, Save the Children, etc, etc…
Cada una de ellas tiene objetivos muy claros, en lo que concierne a World Vision, trabajar con las personas más vulneradas para promover la transformación humana, buscar la justicia, protección, bienestar de los niños sus familias y comunidades para que vivan libres de pobreza. No nos quedemos sólo esperando alguien más lo haga, recordemos que los pequeños cambios hacen la diferencia, empecemos por nosotros mismos.
Datos para reflexionar y sumarnos a la causa:
- De acuerdo con el INEGI, el número de personas que colaboraron como voluntarios en ONG, es 1 millón 228 mil, que representan 70.5% del personal total (remunerado y voluntario).
- El estudio del Cemefi añade que alrededor del 60% de las fundaciones cuenta sólo con cinco o menos empleados en su plantilla laboral, y aunque la mayoría de ellos está en la nómina de la fundación, el 40% recibe su salario de la empresa.
Y como en una de mis primeras columnas dije «No es obligación del estado dar empleos, educación, alimentación, vivienda, etc; pero lo que sí es su obligación es proporcionar un ambiente en donde sea fácil generar cada una de las anteriores. El estado tiene que generar condiciones, no dar.»
Entonces, los invito a, ser persuasivos, voluntarios y altruistas, NO en pensar que otro debe hacerlo (“No es mi problema”), desechar de nosotros la indiferencia con los problemas que nos atañen (“No tengo tiempo”, “No me gusta ayudar”). Dejemos de ser hipócritas pensando nos duele más un insulto de Trump, que nuestra propia gente, seamos congruentes con nuestras acciones. Conozcan sus límites, corríjanse en comunión con sus virtudes para mejorar su situación actual y así de manera inmediata veremos el cambio en nuestro entorno. Estos son unos de los pocos pasos para ser y sumarse como un verdadero agente de cambio, un liberal, que sabe que no todo en la vida es obligar a unos para ayudar a otros (principalmente mediante impuestos, quitarle a “A”, para darle a “B”).
Ayuden, hay un sinfín de personas que necesitan el apoyo de ustedes, donen sangre, denle comida al que lo necesita, a quien pueda trabajar hágale una oferta de trabajo o infórmenle de una, provean de ropa, útiles, productos de aseo personal a casas hogar, asilos, albergues (concédanles alguna visita) y regálenos 5 minutos de su día a las personas que salimos a las calles a buscar donadores, voluntarios, para estas grandes causas, porque…
¡Es mucha la desgracia y poca la ayuda!
“Josué Segura, miembro fundador de México Libertario, estudiante de Derecho en la UNAM, colaborador en publicaciones, crítico político liberal.”
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